El Volcán de La Palma

El Volcán de La Palma

Practicar senderismo en La Palma es lo más parecido a hacer una excursión fuera de la Tierra. Nunca mejor dicho si ocurre donde el volcán de La Palma está ahora mismo en plena erupción. Al menos mientras termina de llegar el senderismo extraterrestre. Hasta entonces (e incluso entonces), caminar por la Isla Bonita dejará satisfechos tanto a los amantes del deporte como a los devotos de los paisajes singulares.

el último volcán de La Palma

Aunque la erupción actual podría considerarse el último volcán de La Palma, la realidad es otra cosa: La Palma es un volcán. Toda la Cumbre Vieja (la del sur) es un enorme volcán que produce erupciones de tanto en tanto.

Actividades que practicar al aire libre en La Palma

Durante todo el año, además. Si nos centramos únicamente en el senderismo, las opciones siguen siendo muy numerosas. Todas impresionantes. Pero entre ellas, por vistosidad y relevancia, destaca la Ruta de los Volcanes. Cerca de 25 kilómetros a través de una historia de miles de años.

Caminando entre volcanes

La Ruta de los Volcanes se ubica dentro del Parque Natural de Cumbre Vieja, al sur de la isla. Aunque se trata de un itinerario para iniciados (más por su extensión que por su dificultad), el esfuerzo merece la pena (de todas maneras no hay ninguna obligación de cubrir todo el trazado en un único día). Ya no solo por lo característico del terreno, también por las espectaculares vistas que pueden contemplarse desde ahí. Cráteres, espléndidas costas, bancos de nubes y hasta la isla de Tenerife, no tan cercana en realidad.

bosques de pinos canarios

Los bosques de pinos salpican el paisaje baldío proporcionando refugio a algunas especies autóctonas que incluyen una rica variedad de invertebrados, mamíferos, reptiles y aves.

El inicio de la senda lo encontramos en el refugio del Pilar, punto en que está el centro de interpretación del recorrido. Enseguida surgen las coníferas, antes de alcanzar el primero de los altos destacables: el mirador Birigoyo. En días despejados la vista alcanza hasta el Teide, en Tenerife, el pico más alto de España con 3715 metros.

Hacia las Salinas de Fuencaliente

El trayecto desemboca en las Salinas de Fuencaliente, donde el blanco y el rosado de las sales se funden con el azul del océano Atlantico y el marrón grisáceo de la tierra volcánica.

Pero antes de llegar hasta allí, hay que superar el cráter del Hoyo Negro y ascender por la cuesta de Las Deseadas, momento en que el camino comienza a descender y a resultar menos cansado. A partir de aquí, el mirador del Cabrito, el volcán Martín y un lugar en el que tomar un pequeño descanso, la zona recreativa de Fuente de los Roques.

Lo mejor queda para el final. El último tramo esta protagonizado por dos de los volcanes centrales de la ruta que bautizan: el de San Antonio y el Teneguía, protagonista de la erupción más reciente en la isla hasta la que tuvo lugar en septiembre de 2021.  50 años han transcurrido entre una y otra.

el Volcán de La Palma

El sucesor del Teneguía todavía no tiene nombre, pero sí se barajan algunas opciones. Cabeza de Vaca, Jedey, Tajogaite. Términos estos dos últimos pertenecientes al pueblo guanche, antiguos habitantes isleños cuyo espíritu sigue muy presente por estos parajes. Envolviendo en su misterio a los que se animan a recorrer la Ruta de los Volcanes.